Tras la celebración del I Taller de Pelotamano de la Temporada 2017, el pasado 31 de enero, el próximo, martes 21 de febrero, tendrá lugar una segunda jornada impartida nuevamente por el experto Juan Manuel Hernández Auta.
El taller tendrá lugar entre las 17.00 horas y las 18.30 horas en el Parque “Gavia Los Hormiga” de El Charco, gracias a la colaboración del Ayuntamiento de Puerto del Rosario al ceder el uso de dichas instalaciones. Todos los talleres son completamente gratuitos y abiertos a la participación de cualquier interesado, sin importar género o edad.
El Cabildo de Fuerteventura, a través de la Consejería de Deportes, que dirige Andrés Díaz Matoso, viene celebrando con éxito desde el año 2010 este Taller de Pelotamano que ofrece el experto y conocedor de este juego tradicional, Juan Manuel Hernández Auta, prestigioso investigador y divulgador de los juegos y deportes tradicionales canarios.
Estos talleres se realizan de manera gratuita y están abiertos a la participación de cualquier interesado, estando prevista la celebración de un taller cada quince días hasta el próximo mes de junio. Una iniciativa mediante la que se pretende «invitar a la población a conocer nuestros juegos y deportes canarios», explica Díaz Matoso.
La actividad desarrollada en este taller ha permitido recuperar y difundir la práctica de esta disciplina en Fuerteventura, siguiendo en la misma línea de promoción de los juegos y deportes tradicionales de Canarias que mantiene el Cabildo a través del Programa “No Olvides lo Nuestro”.
Para más información sobre cómo inscribirse en este taller, contactar con el Departamento de Deportes del Cabildo de Fuerteventura, en la calle Dr. Fleming nº 1 en Puerto del Rosario, o a través de los teléfonos: 619 406 013 y 928 86 24 00.
La pelotamano es un juego tradicional canario basado en el golpeo con la mano a una pelota pequeña y maciza de cuero. Históricamente llegó a ser muy popular en Fuerteventura, pero fue decayendo hasta su total desaparición en el siglo pasado.
El juego consiste, a grandes rasgos, en intentar devolver una pequeña pelota maciza de cuero, con un diámetro de entre 45 y 47 milímetros y un peso de alrededor de 50 gramos, cuando es lanzada por el equipo contrario, antes de que dé dos botes en el suelo y golpeándola con la palma de la mano o, en su caso, en pararla con la mano o el pie para que no siga su curso. La pelota está compuesta de un núcleo de tiras de goma recubierto de hilo de lana y, finalmente, forrada de dos piezas de cordobán (cuero de cabra curtido).
